Domingo, 07/09/25

Jñana & jñani

 “Da igual con qué lo golpees.

Lo importante es que el recipiente se rompa.”

Shambhu

 

Jñana, aquél Conocimiento no intelectual, no busca la solución al problema, sea el que sea, sino su trascendencia. Ir más allá de la fuente que lo originó: manas, la mente. El problema es siempre de origen mental. Este es el motivo por el que al Jñana tan sólo le interesa el estado anterior a la mente.

Este es el origen de la posible controversia que aparece cuando nos relacionamos con un jñani, aquél que conoce, el que tiene el conocimiento. Normalmente se busca alivio al sufrimiento y se espera consuelo, cuando no compasión. Es algo natural que así suceda.

Sin embargo, el jñani, sabe que los grandes problemas del mundo y del ser humano, al ser de origen mental, no se solucionan con migajas de conmiseración. Por ello, intentará poner a su interlocutor más allá de la mente, justo en el estado en que él se encuentra.

¿Lo va a conseguir por medio de palabras y explicaciones? En absoluto. La transmisión de semejante conocimiento sucede por ósmosis. Se trata de un sutil contagio. Ahora bien, para que tal contagio suceda es imprescindible una apertura completa por parte del interlocutor.

Tal apertura ha de ser tan total como diáfana. No puede haber obstáculos que aparezcan a través de las expectativas que interrumpan la transmisión. Sin embargo, la apertura no es suficiente. Además, se ha de poseer una sincera entrega a la enseñanza que se le intenta transmitir.

Así pues, va a dar igual de lo que hable el jñani, será un burdo soporte a su enseñanza sutil. El no persigue tener la razón en su exposición. En realidad, tan sólo quiere una sola cosa: romper el recipiente cristalizado en que vive el discípulo atrapado. Tal recipiente es la mente.

 

Silencio Interior – Escuela

info@silenciointerior.net

 

 

Jñana & jñani – 07/09